jueves, 6 de julio de 2017

Pimp: memorias de un chulo - Iceberg Slim

                      
Título: Pimp: memorias de un chulo
Autor: Iceberg Slim

Páginas: 349

Editorial: Capitán Swing
  
Precio: 19 euros
 

Año de edición: 2015

Vaya por delante una advertencia: este es un libro duro, no apto para almas sensibles y delicadas poco habituadas a guarecerse tras una armadura en caso de necesidad. Cuenta la vida de un chulo en el Chicago de los años 30 y 40, y está plagado de violencia, machismo, sadismo, penuria y a veces, crueldad. Literatura social porque cuenta cómo es y cómo funciona una clase de perdedores marginales, acostumbrados a trabajar en condiciones muy difíciles.

Como decíamos, el autor no se ahorra detalles. Tuvo una infancia bastante desgraciada y durante muchos años no le perdonó a su madre el que abandonase a su tercera pareja, un padrastro con el que el chico estaba encantado,para irse con un sádico maltratador.

A partir de ahí, sin estudios y viviendo en un barrio pobre de aquellos años difíciles del siglo pasado, no encontró otra salida y no se le ocurió otra cosa que explotar a las mujeres de la calle. En su primera estancia en la cárcel, se formó y aprendió dos cosas: todas las tácticas para manipular y dominar a las mujeres, y a dominar sus sentimientos. La historia es brutal, dura y terrible, hasta hacernos entender que el infierno es algo que está entre nosotros y que hay que aprender a evitar.

Slim entra en materia siempre que es necesario y corre la suerte de un extraño Dante, negro y marginal, que va descendiendo por los diferentes círculos infernales (la calle, la cárcel, el «Callejón de la Felicidad», la celda de aislamiento...), conociedo todo tipo de deprevaciones morales. Estuvo en prisión cinco veces y la experiencia fué terrible.

El autor utiliza bastante argot, pero he necesitado cosultar más que un par de veces el glosario que hay al final del libro. El texto es como decíamos muy duro, pero también poético, inteligente, penetrante y bien escrito.

Dotado de un verdadero talento, Slim se autoanaliza y llega a la conclusión de que se convierte en chulo, por un lado porque odiaba inconscientemente a su madre, si no, no es posible ser tan misógino. Y por otro lado, trata a las mujeres del mismo modo en el que los hacendados trataban a los esclavos negros, como ganado. Al fin y al cabo, un chulo es una plantación en movimiento.

En fin, unas memorias que vale la pena leer, impresionantes y tremendas, perturbadoras porque en cuanto uno se distrae un poco, se identifica con el protagonista sin darse cuenta. Están excelentemente bien escritas y han teido una infuencia decisiva en autores como Irvine Welsh, que sin haberlo leído no hubiese podido escribir «Trainspotting», y en los orígenes del rap, que sin sus diálogos no hubiese podido desarrollar y crecer como lo ha hecho. 

Un libro sobrecogedor, que ofrece un billete para dar una vuelta por varios infiernos e inframundos, bien escrito, muy interesante y que ha tenido una influencia muy considerable en la cultura estadounidense. Parece mentira que existan submundos así. Como suele decirse, la realidad supera a menudo a la ficción.
    
Robert Lee Maupin (Chicago, 1918-1992), más conocido como Iceberg Slim o Robert Beck, fué un proxeneta estadounidense que alcanzó la fama con este libro de memorias y luego escribió unas cuantas novelas en el mismo tono.

Su nombre de guerra, Iceberg Slim, se debía a su proverbial frialdad en situaciones comprometidas y a tener un tipo delgado y estilizado, media 1,85 m y pesaba 72 kg.

Su padre les abandonó a él y su madre, que empezó a coleccionar novios desastrosos y maltratadores, así que su infancia no fué muy placentera. Fué chulo desde los 18 hasta los 42 años y declaró que en total habían estado trabajando para él más de 400 chicas. 

Después de una de sus estancias en la cárcel,se dió cuenta de que era demasado mayor para seguir con su trabajo habitual y lo dejó, sentó la cabeza, se reconcilió con su madre moribunda, se hizo vendedor de insecticidas y conserje eventual, se casó y tuvo tres hijos. Su mujer le convenció para que escrbiera la historia de su vida.

Iceberg Slim adolescente

Publicado por Antonio F. Rodríguez.

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